Si soy amantes del vino os gustará esta mesa planteada únicamente para hacer catas o simplemente un aperitivo y tener nuestros vinos bien a mano. La mesa consiste en una bobina de cable de madera adaptada en su base para poder albergar unas cuantas botellas, bajo la tabla tiene un sencillo sistema donde guardar las copas boca abajo, y en su centro hay una cubitera para mantener las botellas de vinos blancos y rosados bien frescas.
Como podéis ver en la imagen la mesa encajará muy bien en una decoración rústica.
Necesitaréis una bobina de cable como la de la imagen superior para poder empezar a trabajar, de tamaño mediano y que pueda utilizarse como una mesa una vez puesta de lado.
Es necesario desmontar la bobina para poder adaptarla como botellero, os tendréis que ayudar de una sierra para poder desmontarla. En la parte superior cortaremos un hueco circular para poder introducir la cubitera en el interior, y uno de los laterales lo tendremos que cortar para poder crear el botellero, los huecos del botellero los podéis realizar con algunas tablas de madera de palets.
Bajo la tabla superior deberéis construir con unas tablas de madera fina unas ranuras, donde se puedan colocar las copas sujetas por su base boca abajo.
No olvidéis barnizar generosamente la madera con un tono rústico, así alargareis la vida de vuestro mueble y mejoraréis su acabado.
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